Un problema de vida o muerte
Quedarse con los brazos cruzados, esperando a que ocurra con nosotros lo que se narra en la historia de San Bernardo o bien preguntarse ¿Por qué esperar a que sea demasiado tarde? No dejemos que sigan destruyendo nuestro futuro. Está en nuestras manos apoyar la iniciativa de las ecoaldeas, y demostrar su efectividad. No es tiempo de seguir negando la realidad que nos ofrecen los desastres medioambientales que se producen a diario.
Es hora de tomar desiciones que favorezcan el positivo prevalecer de nuestra especie, para no terminar dentro de la realidad de una historia que ahora suena a ficción. No esperemos más, porque es una larga tarea, pero no imposible aún.