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Trabajadoras textiles en Chile y ONG Matriavisión: trabajo precarizado, derechos laborales y sustentabilidad

Tercerización del empleo. El caso chileno

Uno de los problemas más relevantes, que se traduce en deficientes condiciones laborales de la mujer en la industria textil en Chile lo constituye la tercerización del empleo. Allí la empresa textil se provee del trabajo de manufactura a través de un intermediario, evitándose así la mantención de talleres de trabajo. Este intermediario “encarga” los productos a mujeres que trabajan en sus casas, con sus propias máquinas – de cuya mantención se ocupan ellas – gastando su electricidad, sin contrato laboral ni otros beneficios sociales y sin la posibilidad de negociar las tarifas de sus costuras con el intermediario ni con el destinatario final, que son las tiendas del retail y las grandes marcas de ropa.

ONG Matriavisión y el fomento de los derechos laborales

Matriavisión es una ONG en reciente formación orientada al desarrollo humano sustentable y la equidad de género. A través de nuestra organización nos encontramos ejecutando desde el 2013 un proyecto que forma parte del Programa de Derechos Laborales que lidera Fondo Alquimia, fundación chilena que ejecuta iniciativas con agrupaciones de mujeres canalizando para tales efectos fondos internacionales – en este caso, FLOW de la Cooperación Holandesa y ONU Mujeres. La primera etapa del proyecto que hemos ideado consiste en la campaña “Sácale molde a tus derechos”, la que se centra en la sensibilización y difusión de información a la comunidad sobre los derechos de las trabajadoras textiles en sus domicilios. Esta campaña la llevamos a cabo a través de un canal de impacto gráfico – mediante una postal informativa – y uno radial, por medio de un spot que circula en radios comunitarias de la región de Valparaíso (ambos productos se encuentran disponibles en nuestra web).

Reciclaje, compra consciente y género.

Con la segunda parte del proyecto, que se encuentra en proceso de ejecución, pretendemos abarcar dos aspectos del fenómeno, enfocándonos nuevamente en la sensibilización hacia la comunidad. En primer lugar buscamos generar conciencia sobre el impacto de la elaboración del producto textil en términos de su sustentabilidad medioambiental, económica y social: ¿con qué materiales y con qué costo fue fabricado?, ¿cuál es su huella de carbono?, ¿es perjudicial para la salud? ¿cuál fue la remuneración para las personas que lo confeccionaron?. La idea es propiciar una reflexión sobre consumo consciente y comercio justo, fomentando al mismo tiempo el reciclaje y la reutilización. Y un segundo aspecto al que apunta esta parte del proyecto, consiste en plantear el tema del “ciclo de vida” del textil como un asunto de género, en la medida que las mayores productoras y consumidoras de ropa son mujeres. La idea en este caso es que las propias mujeres cuestionen el sistema comercial y los intereses que mueven a las grandes marcas, desconfiando de los “imperativos de la moda exclusiva” y también de los “precios rebajados”, que esconden una realidad de explotación laboral que afecta la calidad de vida de millones de trabajadoras y sus familias. Cabe destacar que este fenómeno no sólo aqueja a nuestro país sino a múltiples países en Latinoamérica y Asia, entre otros; por lo que esperamos que nuestra campaña contribuya de un modo global a la conciencia y fomento de un desarrollo social sostenible.

Verónica Hurtado C., ONG Matriavisión